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MIS OBSESIONES

El chico mesías

Lo conocía porque era amigo de mi hermano. Por varios motivos, se veía afectado por una especie de tendencia al mesianismo que podía detectarse en su forma de vestir: chilabas, jerseys de lana, pelo enmarañado y patillas largas, todo como muy multicultural. Solía ir por ahí con una cámara polaroid con la que hacía fotografías de paisajes, de árboles, de rocas aisladas en el camino, o se hacía fotografiar mirando al horizonte, o con el mar a su espalda, o tumbado en el césped. Un moderno hijo de la madre naturaleza, un espíritu panteísta y reflexivo, ferviente defensor de los débiles y de las causas perdidas, aficionado a toda música que sonara islámica, o paquistaní, o a cultura del tercer mundo.

A veces me lo encontraba y me hablaba de su trabajo en un centro de tratamiento de la drogadicción. O veía los regalos que les hacía a sus amigos, regalos que eran algo más que un objeto, eran espiritualidad en estado puro: recopilatorios de música étnica con diseños hechos por él mismo, con recortes de ideas, reflexiones y pensamientos profundos, dignos de figurar en cualquier libro de Paulo Coelho o Susanna Tamaro. Dardos certeros dirigidos al alma, recortes de fotos de noches estrelladas y de trigales mecidos por el viento, palabras pulcramente caligrafiadas, trozos de cuerda y de telas y botones pegados. Cuando te hablaba, él era un mero soporte de las energías de la naturaleza, que llegaban a tus oídos en forma de enseñanzas misteriosas y eternas.

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Un día visitó una página web en la que escribí hace años, y no le gustó nada. A mí, más dado a las banalidades y ciego a la senda del espíritu, me había dado por escribir un artículo sobre un hecho básicamente trivial. Una vez quedé con una chica y todo fue bien hasta que en el coche en el que íbamos montados -y que conducía el chico mesías- empezó a propagarse un inequívoco aroma a pedo. Yo no fui, pero en ese momento la chica se calló y no pronunció palabra en el resto de la noche. En el artículo simplemente llegaba a la conclusión de que quizá había sido ella y se sentía avergonzada. Tras leerlo, el chico mesías vino directo a mi casa y declamó un sólido discurso sobre el respeto a los demás, sobre mi dudosa moralidad y ética, sobre lo vomitiva que en líneas generales era mi página. Me exigió que directamente eliminase el artículo.

Aquella chica ni siquiera era su amiga, pero le afectaba profundamente pensar que ella pudiera leerlo y sentirse muy mal por el hecho de que alguien hubiera insinuado que la autora del pedo traicionero en el coche había sido ella. Mi crueldad no tenía límites. Por otro lado, no podía soportar que también hubiese escrito que llegué a sospechar del que conducía (o sea, él). Y además, mi página se burlaba de los subnormales (en realidad sólo había citado a los subnormales en un artículo sobre Reynols, grupo argentino de rock cuyo cantante padece síndrome de down; ahí acababa toda referencia). Sus palabras literales fueron: "Me parece fatal tu página, está al mismo nivel de las webs de nazis. Los chicos con síndrome de down no sólo no son inferiores, sino que además se puede aprender mucho de ellos". Embriagado por su discurso, omití comentarle que había recibido varios mails de felicitación por el artículo de padres con hijos con síndrome de down.

Borré el artículo de la chica del pedo y se fue a casa la mar de contento. El mesías me había revelado la verdad. Imposible no dejarse convencer por las palabras del chico que llora cada vez que pisa una hormiga. Actualmente vive en una casa en el campo y trabaja en una asociación de chicos subnormales. Su bondad, su comprensión y su tolerancia no tienen límites. Por eso he escrito este artículo dedicado a él, recordando su ejemplar figura, agradeciendo a la caótica vida que de vez en cuando aparezcan seres de este tipo que desde su estremecedora sensibilidad, nos enseñan los caminos del corazón.

11 comentarios

Jordan Flight 45 -

As you say, good individuals with training for all-around growth is a perfect blend. Now people are almost cannot resist the temptation from wealth. They achieve cash through diverse methods. I'm so unhappy to view that.

don luisito -

hola
Por casualidad he llegado a tu pagina y me he quedado alucinado viendo la foto del chico mesias, es mi doble, pero juro que no puedo ser yo, no solamente no tengo alma de mesias sino que ni siquiera de martyr.
Cómo podría encontrarme yo con esa proeza del humanismo, como yo podría cruzarme con ese cúmulo de tópicos y de autosatisfaccion personal, cómo podría yo mirarme al espejo y teniendo presumiblemente la misma cara, sentirme tan bien en mi piel como el niño melón.
Hasta a mi novia le enseñé la foto y nos confundió, tengo que encontrarle, dios me envia esta señal....
PD: yo tengo menos barriga, sin animo de ofender a nadie y mandando un saludo desde aqui a todos los barrigones que son una gente maravillosa

bofifa -

Este artículo tiene mucha más miga de lo que parece, creo conveniente hacer un análisis de él que, probablemente, sólo me interese a mí y poco más. Me ha recordado cuando, hace años, solía salir con una chica que liberaba ballenas atrapadas, reciclaba cuando aun casi nadie lo hacía, arremetía contra la policía o cualquier símbolo de poder capitalista y era defensora de cualquier causa perdida. Recuerdo que una vez discutí con ella ante una noticia (éramos muy intelectuales y reflexionábamos acerca de las noticias de actualidad de la tele) de una mani antiglobalización, cuando un antidisturbio se cargó, creo, o lesionó grabemente a un manifestante. Por supuesto, el policía era el malo y el hijo puta, sin darle demasiada importancia a las intenciones del malparado manifestante (que ni siquiera recuerdo, pero quizá, y sólo digo quizá porque no lo sé, tuviera una actitud agresiva y temeraria, como suele pasar en muchas manis). Creo que me exalté especialmente porque aquella noche había planeado una cena romántica, cociné espaguetis de sobre, velitas y eso, supongo que poner el telediario no fue una buena idea (al fin y al cabo, fue la primera y última vez que me lo curré rollo seductor-atento-polvo seguro). A mí, lo que más me jode no son ellos en sí, sino la reacción de la mayoría de la gente ante ellos, la idea que se forman de ellos, las propiedades sobrenaturales que les atribuyen a su personalidad, la simpatía y aceptación (quizá cierta envidia?). Es como pasa recientemente con los maricones (Boris ha hecho mucho daño en esta sociedad, encima es escritor), que por el hecho de que, básicamente, les gusta que les den por culo, son muy simpáticos, divertidos, inteligentes y sensibles. Además, volviendo a esta chica, era como un guetto, cuando oía hablar a alguien sobre que había viajado, o que había estado de voluntario no sé dónde, o que se había leído las venas abiertas de latioamérica, estábamos hablando de alguien, inevitablemente, INTERESANTE. En fin, que yo no tengo nada en contra, salvo algún qué otro trauma personal, con este tipo de gente, aunque, en mi experiencia, mi opinión es que tienen un esquema demasiado plano, como que coges una cosa y te quedas con todo el lote, un lote que ni siquiera veo que esté conectado de alguna manera, pero ya todo el mundo lo presupone.
En mi caso, creo que solía cabrearme más la estrechez de miras de la gente que se mostraba admiradora de estas personas, que les tachaban como héroes contemporáneos como conclusión de un argumento que yo no era capaz de seguir.
De todos modos, en los últimos años he cambiado de orientación, y mi intención es que la gente me ame por lo que soy, por ser un auténtico capullo. Por mis carencias en lugar de mis supuestos dones. La gente que realmente te conoce y te quiere creo que lo hace precisamente por eso, y siempre resulta mucho más divertido.

Mr. Glasshead -

Por cierto, ¡feliz año nuevo a todos!

Mr. Glasshead -

Rutenman: jaja, sí que he escuchado a Slo Mo Rappin Retard, tiene su gracia. En cuanto a Reynols, la experiencia de escuchar uno de sus discos oscila entre lo genial y lo irritante. Recuerdo que uno de ellos es simplemente un disco sin nada dentro, con lo que quieren expresar algo así como la inmensidad del universo.

Lucinda: igual me equivoco, pero fue demasiado casual que pasara de hablar tranquilamente a parecer autista, con ese pedo de por medio. Y en lo que respecta al chico Mesías, me pone muy de los nervios cuando alguien dice de él "es muy sensible".

Coronel Kilgore: me gustaría ver cómo reacciona el chico mesías en una jungla rodeado por los ruidos de las Ak-47.

Coronel Kilgore -

No se deje engaña Mr. GlassHead, de estos he visto yo unos cuantos en Vietnam, me conozco perfectamente a los de su calaña, por culpa de hippies asi perdimos la guerra...

Un saludo

Lucinda -

La que tendría que escribir un artículo sería la chica esa, hombre... diciendo qué motivos le llevaron a no admitir con gracia ser la autora del gas silencioso, y así evitar que dos amigos se enfrentaran. :)

Me ha encantado la expresión "el chico que llora cada vez que pisa un hormiga". La verdad, como persona en ocasiones algo intolerante, a veces me sorprende ver cuánta gente como tu amigo el Mesías es tan o más intolerante que los mismos a los que critican.

Rutenman -

Por cierto, no sé si sabes que Tomasín se ha convertido en casi todo un referente. ¿Conoces a Slo Mo rappin retard?

Rutenman -

Me parece cojonudo que hayas mencionado en este artículo a una de las mejores bandas underground de todos los tiempos.

Ah, su amigo es todo un ejemplo a seguir. Sólo le falta tocar la pandereta.

Un saludo y feliz año Glasshead!

Mr. Glasshead -

Yo lo respeté, pero en un cuidadoso y trascendente análisis creí descubrir que había sido ella. Está claro que a pesar de todo me salté algún protocolo :-)

engelson -

las cuestiones o polémicas de ese tipo deben tratarse con sumo cuidado, respetando el derecho constitucional de presunción de inocencia pedorra